El ROI son las siglas en inglés de “Retorno de la Inversión”, una métrica que se utiliza en marketing para saber cuánto ha ganado o perdido una empresa según la inversión realizada. En marketing, es una métrica que hay que tener muy en cuenta y que no hay que perder de vista, ya que es uno de los principales indicativos de si una campaña está teniendo éxito o de si, en cambio, no está dando en el clavo.
De hecho, en nuestra experiencia como agencia de marketing hemos experimentado cómo una correcta medición del ROI puede convertir una campaña con resultados desalentadores en una campaña de alto rendimiento.
Concretamente, el ROI en growth marketing se utiliza mucho debido a que con esta metodología se busca encontrar oportunidades de crecimiento de manera constante.
Dicho esto, si has llegado hasta aquí es porque te interesa saber la forma más efectiva de medir el ROI en campañas de growth marketing, así como todos los factores que hay que tener en cuenta para mejorar el ROI. Y de eso es de lo que vamos a hablarte.
Tómate este artículo como una guía que contiene todo lo necesario para potenciar el retorno de la inversión de tus campañas de marketing de crecimiento. ¡Vamos allá!
Empezamos por lo más importante. En este apartado queremos hablarte tanto de la fórmula matemática que se utiliza para obtener el ROI en una campaña de growth marketing como de algunas herramientas que puedes utilizar para obtener los datos necesarios que necesitas para aplicar la fórmula.
Además, también mencionamos algunos ejemplos prácticos que te ayudarán a entender mejor el concepto y cómo aplicarlo.
El ROI es una métrica que se expresa en porcentaje, y obtenerla es realmente sencillo. Simplemente hay que restar la cantidad de inversión realizada a los ingresos obtenidos, dividir el resultado entre la inversión y multiplicar el resultado por 100.
Cuando hablamos de ingresos obtenidos en la fórmula del ROI, nos referimos al rendimiento neto que hemos obtenido, es decir, a la ganancia neta que nos queda tras pagar todos los costes.
Para que lo veas más claro, pondremos un ejemplo. Imagina que en una campaña has invertido 20.000 euros y has obtenido unos ingresos netos de 24.000 euros. La fórmula aplicada a este caso quedaría de la siguiente manera:
El resultado final de este ejemplo nos muestra que se ha obtenido un 20% de beneficio con la campaña. Por lo tanto, se han generado ganancias, lo que indica que tu campaña es rentable. Pero, ¿es un 20% un ROI bueno o mediocre?
En este caso, un ROI del 20% significa que por cada euro invertido has obtenido 1,20 euros. En un principio, esto es positivo y signo de que la campaña ha sido rentable y exitosa. Sin embargo, para valorarlo hay que tener en cuenta factores como el tiempo en el que se ha obtenido ese ROI y el nicho o sector en el que se ha obtenido. Por ejemplo, conseguir un ROI del 20% en un mes puede ser positivo, pero en un año puede no serlo tanto. Y de la misma manera, este ROI en un mercado saturado de competencia puede ser muy bueno, pero no serlo tanto en un mercado en crecimiento. En definitiva, hay que tener muy en cuenta el contexto en el que obtienes el ROI en tu campaña de growth marketing.
Normalmente, las plataformas a través de las cuales lanzas tus campañas o las herramientas de análisis web van a proporcionarte datos suficientes sobre su rendimiento para que puedas calcular el ROI. Por ejemplo, en el entorno de Google puedes utilizar la herramienta gratuita Google Analytics que te permite rastrear tus conversiones. También te recomendamos otras plataformas como HubSpot o Marketo, las cuales pueden ofrecerte información más detallada para que entiendas mejor el impacto de tus campañas.
Lo que nosotros te recomendamos es que no utilices una única herramienta para medir el ROI en growth marketing, pues combinar varias te va a dar una visión más completa y va a permitir que puedas detectar posibles problemas con una mayor probabilidad.
Para que le saques todo el partido a esta métrica, queremos continuar con el ejemplo anterior en el que obtuvimos un 20% de ROI. Ahora imagina que ese ROI lo has obtenido en una campaña en Meta en la que tu anuncio se ha mostrado tanto en Facebook como en Instagram.
Los 24.000 euros de beneficios no se han obtenido por igual de ambas redes sociales, pues lo más probable es que una haya generado más ingresos que otra, pero la pregunta es: ¿cuál habrá generado más ROI? En otras palabras, la plataforma que nos ha generado más ingresos no tiene por qué ser la que nos haya proporcionado un mayor retorno de la inversión, pues todo dependerá de lo invertido en cada una.
Para ello, podemos aplicar la fórmula del ROI a cada plataforma, pero para ello necesitamos saber primero qué invertimos en cada red social y los beneficios de cada una. Supongamos que en la campaña de Facebook invertimos 12.000 y nos ha generado 15.000 euros de beneficios; y que en la de Instagram invertimos 8.000 y nos ha generado 9.000 euros. El paso siguiente será sacar el ROI individual de cada plataforma.
¡Listo! Con el ROI podemos ver de forma clara cuál ha sido la campaña con mejor retorno de la inversión y por cuánto lo ha sido. Esto, de cara a futuras campañas puede ser interesante porque nos ayuda a saber qué canal genera mejores resultados y por cuál hay que apostar más.
Antes ya hemos comentado que no hay que ver el ROI de forma aislada, sino tener en cuenta otros factores como el tiempo en el que se consigue y el sector. Y es que, si queremos que realmente nos proporcione información de valor, debemos verla en su contexto.
En este apartado, te comentamos otros factores que hay que tener en cuenta a la hora de obtener conclusiones de esta métrica.
Por último, queremos darte tres consejos muy importantes para que puedas potenciar el ROI en tus campañas de growth marketing y obtengas resultados muy positivos.
Realizar una buena segmentación de tus campañas de growth marketing va a hacer que llegues realmente a la gente que está interesada en tu marca y que, por tanto, tus posibilidades de conversión aumenten; con la consiguiente mejora del ROI que ello supone.
Esto, a su vez, va a impedir que malgastes recursos llegando al público equivocado. En definitiva, segmentar bien a tu público te ayuda a que se invierta mejor el dinero en tus campañas.
Lo ideal a la hora de lanzar una campaña online no es esperar con los brazos cruzados esperando a ver qué pasa. En cambio, te recomendamos que vayas realizando los cambios que sean necesarios periódicamente para optimizar los resultados. Por ejemplo, puedes ir cambiando los presupuestos para que se destine más inversión al anuncio o anuncios que mejor funcionan.
Antes de lanzar la campaña definitiva, puedes hacer pruebas con diferentes anuncios a los que destines una inversión menor. Esto te ayudará a saber qué tipo de anuncio es el que mejor funciona y a invertir con mayor seguridad y éxito en el lanzamiento definitivo.