Una auditoría digital es una inspección realizada por expertos en la que se identifican oportunidades de crecimiento dentro de una estrategia digital. En este análisis personalizado se revisan todas las prácticas, estrategias y resultados digitales que una empresa ha desarrollado en su negocio con el objetivo de detectar posibles mejoras que maximicen el rendimiento digital de la compañía y que la lleven a tener mejores resultados y a ser más competitiva en el mercado.
En este artículo profundizamos en cómo se lleva a cabo una auditoría digital para una empresa y analizamos todos los beneficios que tiene para una corporación realizar de forma periódica un análisis de este tipo, pues esta es la clave para que se puedan detectar oportunidades de crecimiento digital reales.
Al contrario de lo que muchas empresas creen, una auditoría digital no solo va a detectar errores más o menos evidentes para que se corrijan. Tampoco se va a centrar únicamente en mejorar aspectos como el SEO o el SEM. Esta inspección va mucho más allá y puede ser lo que ayude a tu marca a descubrir errores difíciles de detectar a simple vista, a detectar mercados interesantes e inexplorados para la empresa, a optimizar las campañas ya existentes y/o a identificar posibles mejoras en la experiencia de usuario a través de los diferentes canales.
Por tanto, hay que entender una auditoría digital como un servicio integral que se adentra tanto en áreas como la eficiencia publicitaria y el análisis de la competencia como en el ámbito de la tecnología publicitaria. En ese sentido, es una herramienta interesantísima para optimizar el rendimiento a nivel holístico.
Para que una auditoría sea realmente efectiva, debe estar totalmente personalizada y recomendar mejoras según las características y necesidades de la propia corporación. Sin embargo, en base a nuestra experiencia en el ámbito de la auditoría digital, hay algunos ámbitos que suelen ser clave para mejorar el rendimiento de una marca y, por tanto, se van a revisar sí o sí en una inspección de este tipo. A continuación te contamos cuáles son.
Toda auditoría digital va a medir y evaluar el rendimiento que una marca tiene en buscadores, pues es una de las principales vías de visibilidad de una empresa en el ámbito digital. Pero no solo nos referimos al posicionamiento de la web en la SERP, sino también al posicionamiento y valoración que su aplicación móvil (en caso de tenerla) tiene en las tiendas de apps y a las acciones orgánicas en redes sociales.
En este análisis se evalúa el histórico de búsquedas de la marca y se tiene en cuenta cómo ha evolucionado y cuál es el volumen en comparación con la competencia. De esta primera parte se extraen determinadas conclusiones acerca de la estrategia SEO de la marca y se identifican posibles palabras clave interesantes, ciertas prácticas de redacción útiles y frecuencias de publicación eficaces. Todo con el objetivo de crear una estrategia que aumente el tráfico orgánico de la marca.
Además de eso, se deben analizar también ciertos elementos por muy básicos que sean para descartar que estén siendo el problema a la hora de posicionar. Hablamos de aspectos como la correcta indexación, los enlaces entrantes o la implementación de datos estructurados.
Por supuesto, también se puede dar el caso de que se detecte que la estrategia SEO está yendo por buen camino y no necesita cambios. Sin embargo, en una auditoría es habitual que detecten posibles mejoras, por muy pequeñas que sean, ya que una estrategia es raro que sea perfecta.
Otro de los aspectos que sí o sí se analizan en este tipo de auditorías es un análisis de las campañas en la red, es decir, de las acciones de pago que la empresa está lanzando en sus diferentes canales. Y, en el caso de no estar llevando a cabo ningún tipo de acción publicitaria digital, se evaluará si es positivo hacerlo.
Primero de todo, se echa un vistazo a los resultados obtenidos con las campañas y, dependiendo de las conclusiones extraídas, se analizará si las posibles mejoras se encuentran en cambiar el presupuesto, el tipo de campaña, la estrategia publicitaria o la creatividad de los anuncios.
Por supuesto, en la auditoría digital los expertos tendrán muy en cuenta el tipo de objetivos que se persiguen con cada acción a la hora de evaluarlas, así como las necesidades de la empresa.
Como hemos mencionado, las auditorías digitales analizan de forma completa todas las estrategias digitales de una marca y, por tanto, también van a evaluar el diseño tanto de la web como de todo el viaje del cliente para ver si se puede mejorar la forma en la que los usuarios interaccionan con la marca.
En este sentido, se analizan aspectos como la usabilidad, que es la facilidad de uso de la web, y la estética, para comprobar el nivel de atractivo del sitio.
En este punto del análisis también es muy habitual realizar pruebas de usuario, como los test A/B para detectar más rápidamente las áreas de mejora.
A día de hoy es fundamental en cualquier empresa utilizar de forma correcta la tecnología que hay a su disposición para poder ser competitiva y aumentar el rendimiento, pero no todas saben cómo hacerlo. Por eso, en una auditoría digital también se va a analizar cómo se utiliza esa tecnología y, en el caso de ser necesario, se harán recomendaciones.
Lo más habitual es que los expertos se encuentren con que la corporación no le saca todo el partido posible a las automatizaciones, sobre todo a la hora de aplicarla a las acciones publicitarias. Por eso, suelen recomendar determinados programas y mostrar a las organizaciones cómo los pueden utilizar y para qué con el objetivo de que los equipos ahorren tiempo y sean mucho más eficientes.
Ahora que ya sabes cuáles son los elementos más comunes que se suelen analizar en una auditoría digital, en este apartado queremos profundizar en la forma en la que los expertos realizan estos análisis. Repasamos tres de las estrategias que estos profesionales suelen poner en práctica para mejorar la calidad de sus análisis.
Para poder detectar posibles mejoras que permanecen ocultas a los ojos humanos, es fundamental que los expertos en auditorías digitales lleven a cabo su análisis siempre basándose en datos reales, dejando de lado la intuición. Por eso, es recomendable que te decantes por un servicio que asegure que sus investigaciones están respaldadas siempre por datos objetivos y por información precisa.
Un diagnóstico de este tipo te va a permitir saber que, por ejemplo, el bajo rendimiento de tu estrategia de email marketing no se debe a la calidad del contenido de los mensajes, sino al momento del día que los envías.
En una auditoría de optimización digital no puede faltar la realización de un análisis competitivo con determinadas empresas del mismo sector, pues esta estrategia también ayudará a saber qué acciones que funcionan está realizando la competencia que nosotros y que realmente ayudarían a mejorar los resultados.
Y es que, en cualquier sector empresarial es fundamental no perder nunca de vista a la competencia más directa, pues de ella se puede aprender mucho. Y no solo hablamos de las acciones acertadas, sino también de los errores para no cometerlos.
El mundo digital es muy cambiante y lo que puede funcionar ahora es posible que deje de hacerlo en un corto periodo de tiempo. Por eso, en toda buena auditoría digital es muy importante que los expertos tengan en cuenta las tendencias del momento para saber qué acciones están obsoletas y cuáles puede ser interesante incorporar por estar en auge.
Esta, además, es una de las razones por las que es aconsejable realizar auditorías de este tipo de forma periódica, pues es una buena forma de garantizar que la estrategia de marca no se quede desactualizada.
SportsKey es una empresa irlandesa que se dedica al desarrollo y a la venta de software para la reserva, gestión y programación de instalaciones deportivas. Es una marca que opera a nivel mundial y que tiene un público objetivo muy amplio que abarca desde colegios y clubes deportivos hasta universidades y comunidades de vecinos.
Tenían la necesidad de llevar mejor todos sus canales digitales y obtener una ventaja competitiva en diferentes mercados. Con la ayuda de expertos auditores se llevó a cabo un análisis en diez áreas digitales que eran muy importantes para la marca, a las cuales se les otorgó una puntuación según su rendimiento y se ofreció un resultado general y unas recomendaciones clave.
Gracias a ello, la marca pudo tener una visión general de todos sus procesos digitales y disponer de una lista de medidas eficientes a tomar, por lo que ya no iban a ciegas.
Niswey es una empresa que realiza auditorías digitales a marcas y en su web cuentan el caso de éxito de una de ellas que se dedica al sector de las tarjetas regalo y a los programas de fidelización.
La primera cosa que les hizo saber que la marca tenía margen de mejora fue al preguntarles si su empresa se dedicaba al sector B2B o B2C, a lo que respondieron “Bueno, a ambos”.
El objetivo de la marca era que Niswey les ayudara a dirigir su marketing digital para conseguir más usuarios finales, más transacciones y más registros.
Los expertos detectaron que aunque el sitio web tenía visitas, estas no participaban debido a que los usuarios no pasaban mucho tiempo en la página. Y también identificaron la causa: era complicado encontrar la información deseada; en otras palabras, la experiencia de usuario no era buena. Además, el SEO tenía mucho margen de mejora y las imágenes no estaban optimizadas.
En otras palabras, la marca había logrado establecer una idea de producto con el sitio web, pero poco más. Descubrieron que les quedaba mucho camino por recorrer y les dieron las bases y la ruta para seguir progresando.
Una auditoría digital es algo que cualquier empresa debería hacer en cualquier momento de su vida, tanto si acaba de empezar como si lleva tiempo en el sector. Y contratar un servicio como este de forma periódica es algo importante para saber si las recomendaciones están dando sus frutos y también para adaptarse de forma adecuada a las nuevas tendencias del mercado.
El aspecto digital de una empresa es muy amplio y es normal que no se sepa por dónde empezar o qué aspecto se podría mejorar. Con una auditoría de este tipo vas a poder conocer de forma completa las necesidades y oportunidades de crecimiento digital de tu marca, incluso aquellas que nunca imaginarías. Pero para ello es fundamental contar con los servicios de una empresa auditora especializada que base sus argumentos en datos y en información contrastada.