¿Ya sabes qué es el marketing directo y lo has incorporado en tus estrategias de publicidad? Este tipo de marketing es uno de los más efectivos y, sobre todo, más fácilmente medibles, así que es fundamental conocerlo a fondo. Por eso, en este artículo podrás aprender qué es el marketing directo online, sus beneficios y los pasos para hacer una campaña de éxito. ¡Vamos allá!
¿Qué es el marketing directo?
El marketing directo o direct marketing es un tipo de campaña publicitaria que busca provocar una acción en un grupo seleccionado de consumidores (por ejemplo, un pedido, una visita a la tienda o la página web de la marca o una solicitud de información) en respuesta a una comunicación por parte del marketer. Esta comunicación puede tener muchos formatos diferentes, como el correo postal, telemarketing, punto de venta… Uno de los más interesantes es el email marketing directo.
Un aspecto esencial del direct marketing es que la respuesta del consumidor debe ser medible: por ejemplo, si ofreces un descuento para una tienda online, debes incluir algún tipo de cookie o píxel que te permita saber si el usuario ha hecho uso del código.
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¡Mira este vídeo para saber más sobre Marketing Directo!
Con el marketing directo, estarás enviando tus emails o publicando tus anuncios de tal manera que solo los vean los usuarios con más probabilidades de comprar. Por ejemplo, si tienes un restaurante de comida tailandesa, podrías dirigirte solamente a usuarios que vivan en un radio de X kilómetros y que ya hayan registrado una visita a un restaurante similar al tuyo.
Por otro lado, este enfoque aprovecha para ponérselo fácil a los usuarios, haciendo que no tengan que buscar demasiado cuando quieren adquirir un producto o servicio.
El marketing online tradicional tiene un componente impersonal, ya que las campañas se lanzan a gran escala. En su lugar, las técnicas de direct marketing buscan una comunicación mucho más cercana con los clientes.
Si quieres explotar esta característica, prueba a añadir un toque personal a tus campañas de marketing directo. Por ejemplo, si estás usando el correo tradicional para comunicarte con los clientes, puedes escribir a mano las direcciones. De esta manera, les dejarás claro que hay personas detrás de tu marca.
Con las campañas tradicionales de largo alcance, a veces hay que esperar periodos muy largos para ver los resultados y la relación de atribución no siempre está del todo clara. Pero el direct marketing es diferente.
En lugar de lanzar comunicaciones amplias para introducir a usuarios en tu embudo de conversión, aquí estás dirigiéndote directamente a ellos para buscar un resultado directo. De esta manera, es mucho más fácil obtener feedback sobre las acciones que funcionan y las que no.
El marketing directo facilita crear una base de datos muy depurada, por ejemplo, eliminando a aquellos usuarios que no están interesados en recibir comunicaciones de tu marca. Las nuevas reglamentaciones del RGPD hacen que las personas tengan el poder de escoger claramente qué información quieren recibir.
Y en el fondo, esta es una buena noticia para las marcas y no un obstáculo. Si eliminas a los usuarios que realmente no están interesados en lo que ofreces, podrás centrarte en los que verdaderamente importan.
El email marketing directo es uno de los canales online más interesantes para conseguir fidelización y conversiones.
Las newsletters son los "ladrillos" que constituyen la base de las campañas de email marketing. Se trata de comunicaciones de la marca enviadas de manera periódica a una base de datos. Su contenido es generalmente informativo, pero también puedes usarlas para destacar promociones y ofertas especialmente adaptadas al target.
Si vas a usar esta técnica, recuerda que con el nuevo reglamento de protección de datos los usuarios tienen que hacer clic específicamente en la casilla para aceptar el envío de tus newsletters.
Esta estrategia lleva mucho tiempo entre nosotros, pero muchas empresas siguen usándola con buenos resultados. La clave está en filtrar correctamente la base de datos para asegurarte de que solo te diriges a usuarios potencialmente interesados.
Otro aspecto a cuidar es el guion de las llamadas. Tienes que ser capaz de deducir rápidamente si estás ante un cliente potencial o no. Por ejemplo, puedes preguntar directamente: "¿estaría interesado en un servicio para reducir su gasto en X?". Si el usuario dice que no, es mejor descartar la llamada educadamente.
En el entorno online, los publirreportajes de toda la vida se reciclan para convertirse en vídeos de marca. Hay muchas opciones, desde los más creativos y aspiracionales hasta los tutoriales de uso de un producto paso a paso.
Una opción muy potente es combinar el contenido de vídeo con tus newsletters o con tus campañas de publicidad en redes sociales. De esta manera, podrás asegurarte de que solo llegan a los usuarios con posibilidades reales de convertir.
Las postales son una vuelta de tuerca económica y original al marketing directo por correo postal de toda la vida.
En general, las postales suelen usarse para campañas de generación de leads. Es importante que tengan un título visible a primera vista y que destaque el beneficio del producto o servicio, por ejemplo, "ahorra XXX euros en tu seguro de coche este año". Para poder hacer un seguimiento posterior, incluye alguna manera de ponerse en contacto con tu empresa (por ejemplo, a través de un número de teléfono gratuito o un correo electrónico)
Pon en marcha tu campaña de Email Marketing Directo
¿Listo para empezar? Te explicamos paso a paso cómo lanzar una campaña de mailing directo:
Recuerda: una buena planificación y preparación son la clave del éxito para los marketers digitales. ¡Suerte en tus campañas de marketing directo!