Por David Tomas, publicado el 12 septiembre 2024
La innovación disruptiva es un concepto que sirve para hacer referencia a la tecnología que provoca un cambio en el mercado o transforma el ya existente. Sin embargo, para poder entender mejor en qué consiste o qué es la innovación disruptiva, hay que tener claro qué características o peculiaridades tiene, siendo la principal que es la evolución de un producto o servicio a lo largo del tiempo. Esta evolución o cambio se debe, principalmente, a que la continua aparición de competidores obliga a las empresas a mejorar ese producto o servicio, incluso a crear uno nuevo.
Normalmente, en este tipo de situaciones, el growth marketing juega un papel clave, ya que es a través de este tipo de estrategia que se consigue identificar y acelerar el crecimiento de estos nuevos productos o servicios disruptivos.
Importancia y beneficios de la innovación disruptiva
Es importante destacar que uno de los principales beneficios de la innovación disruptiva es que supone un avance social y que permite el desarrollo de nuevos modelos de negocio, lo que permite llegar a mercados donde era muy complicado acceder y llegar a grupos de consumidores cuyas necesidades no estaban siendo cubiertas.
Otra de las ventajas de la innovación disruptiva es que obliga a las empresas a innovar, lo que lleva hacia productos o servicios que, aunque sean más simples, son más baratos y accesibles. Además, también cabe destacar que cuando se reemplazan tecnologías o modelos de negocio obsoletos por unos que ofrecen una solución mucho más eficiente y sostenible, se logra una mayor eficiencia.
Y, obviamente, el consumidor sale ganando ante este cambio, ya que tiene más opciones entre las que elegir a precios más bajos.
Teniendo en cuenta todo esto, podría decirse que la innovación disruptiva es importante para transformar tanto mercados como sociedades, ya que tiene como objetivo principal la mejora de productos y servicios.
Cómo implementar la innovación disruptiva
Para implementar la disrupción tecnológica en una empresa es necesario seguir los siguientes pasos:
Identificar áreas dentro de la empresa en las que la tecnología desempeñe un papel clave o haya una necesidad no satisfecha en el consumidor, y en las que la innovación podría tener un impacto significativo.
Analizar a la competencia para conocer tendencias y encontrar nichos con potencial o nuevos mercados emergentes.
Investigar y explorar sobre tendencias tecnológicas emergentes para encontrar aquellas que puedan ser útiles dentro de esas áreas que necesitan una mejora o donde exista un problema.
Si se ha identificado el área de mejora o el problema y se han encontrado unas posibles soluciones, el siguiente paso es establecer unos objetivos claros y realistas sobre qué se quiere lograr implementando tecnologías disruptivas. Estos objetivos tienen que estar, de alguna manera, relacionados con la estrategia y los objetivos generales de la empresa.
Desarrollar un plan de acción en el que se especifique el tipo de tecnología que va a aplicarse y donde se establezca un periodo de tiempo y los recursos necesarios para implementar esos cambios.
Formar al personal para que pueda entender, utilizar y aprovechar esas nuevas tecnologías.
Aplicar los cambios.
Medir los resultados y cambiar lo que no funcione basándose siempre en lo que se ha obtenido.
Técnicas para fomentar la innovación disruptiva
Existen algunas técnicas o acciones que pueden facilitar la implementación de la innovación disruptiva.
Es fundamental, antes de nada, crear un ambiente de trabajo en el que los equipos se sientan cómodos y motivados a probar nuevas ideas, sin miedo al error. Esto implica apoyarlos para que desarrollen sus propias ideas y las expongan.
También puede ser muy buena idea asociarse o colaborar con otras empresas, startups, universidades o instituciones, ya que compartir conocimientos y experiencias favorece el desarrollo de nuevos productos o servicios. Así como también se debería escuchar a los consumidores, que son los que a menudo tienen necesidades no cubiertas o problemas sin resolver.
En cualquier caso, siempre es necesario invertir en tecnologías emergentes para poder dar con esas oportunidades disruptivas, como sería ahora la inteligencia artificial, que está en plena expansión y crecimiento.
Evaluación del éxito en la innovación disruptiva
Siempre que se apliquen cambios dentro de una empresa, y más cuando se trata de una innovación disruptiva, debe hacerse una evaluación para determinar si realmente ha sido efectiva o no. Para ello es fundamental tener en cuenta aspectos como el crecimiento de usuarios o clientes, así como la forma en la que esos cambios han entrado en el mercado y cómo ha sido su aceptación. Además, es importante tener en cuenta y valorar de forma positiva si ha logrado desplazar algunas soluciones tradicionales o no y si los clientes están o no satisfechos.
Otro dato interesante es el impacto financiero que ha tenido ese cambio para la empresa, por lo que debería calcularse el ROI o Retorno sobre la Inversión, que es una comparación entre la inversión realizada y los beneficios obtenidos.
También puede estar indicando que la innovación disruptiva ha sido un éxito si ha supuesto un cambio en la industria, ya sea porque la empresa ha logrado adelantar a los competidores o porque ha cambiado totalmente el mercado.
En caso de que algunas métricas sean favorables y otras no, podría hacerse una reevaluación para ver si pueden aplicarse cambios que mejoren los resultados.
Cómo gestionar la disrupción tecnológica
Gestionar una disrupción tecnológica puede suponer todo un desafío para una empresa, ya que es algo que está en continuo cambio. Esto significa que es necesario hacer un monitoreo constante y conocer en todo momento cuáles son las tendencias tecnológicas emergentes y debe hacerse un análisis para determinar cómo pueden afectar en la empresa. Cuanto antes se identifiquen las áreas que puedan ser vulnerables a una disrupción, mejor.
También es importante que la empresa sea flexible y tenga una gran capacidad de adaptación a los cambios tecnológicos. Sin duda, este es un punto relevante, sobre todo teniendo en cuenta que, tal y como hemos mencionado, se trata de un sector en continuo cambio y evolución.
Además, y en la medida de lo posible, una correcta gestión de la disrupción tecnológica supone estar al día de los cambios externos y anticiparse a ellos, ya que así pueden convertirse en una ventaja frente a la competencia.
Consejos prácticos y mejores prácticas
En las estrategias de innovación disruptiva, además de todo lo mencionado en el artículo, se pueden aplicar algunos tips que puedan ayudar a aplicar la disrupción tecnológica de manera efectiva. Uno de ellos, y también uno de los más básicos, es que la mente debe estar abierta a nuevas ideas y tener curiosidad por las nuevas tecnologías. Para ello puede ser interesante lanzar programas de formación y educar al equipo en habilidades digitales, siempre desde un enfoque creativo e incentivando la curiosidad.
Otra práctica que puede ser útil en este campo es la de crear equipos multidisciplinarios y espacios de trabajo colaborativos, ya que así es mucho más fácil el intercambio de ideas.
Y, siempre, ver los errores como una oportunidad de crecimiento y mejora, no como un fracaso. Esto es clave tanto para crecer a nivel de empresa como para motivar al equipo, ya que no tendrá miedo a proponer ideas, arriesgarse y probar cosas nuevas.
Ejemplos reales
Hay muchas empresas que son un ejemplo en innovación disruptiva, una de ellas es Netflix, que fue la primera plataforma en ofrecer películas y series en streaming bajo suscripción, cambiando totalmente la manera de consumir contenido audiovisual.
Dentro de este grupo de empresas que han sabido aplicar correctamente la innovación disruptiva también estaría Airbnb. Hasta ese momento, cualquier viajero que quisiera disfrutar de una escapada o unas vacaciones fuera de su ciudad tenía que reservar un hotel. Con Airbnb esto dejó de ser así, ya que empezó a ofrecer opciones más económicas y flexibles, abriendo a más público la oportunidad de viajar.
Otro muy buen ejemplo es WhatsApp, que mejoró el servicio de mensajería y facilitó enormemente la comunicación entre usuarios, puesto que, hasta ese momento, solo existía el SMS, con caracteres limitados y de pago.