Para programar, organizar y almacenar las relaciones con los clientes, una empresa puede utilizar tanto un CRM local como un CRM cloud (o CRM en la nube). Mientras que los CRM locales se instalan en los dispositivos como un programa o aplicación más, los CRM en la nube, como Hubspot, ofrecen sus servicios a través de internet alojando todos tus datos en un servidor y no en tu dispositivo.
Son muchas las ventajas que puede ofrecerte un CRM en la nube y en este artículo queremos que las conozcas, pues aplicar este tipo de soluciones de marketing a tu negocio te ayudará enormemente a ser más eficiente y a hacerlo escalar.
De forma general, un CRM (Customer Relationship Manager), en español “gestor de las relaciones con los clientes”, es una herramienta que permite organizar, automatizar y sincronizar desde un mismo sitio todas las acciones y datos relacionados con la interacción con los clientes.
Los CRM ofrecen una gran cantidad de facilidades a las organizaciones, pues pueden almacenar una gran cantidad de datos, así como automatizar muchas acciones, entre otras funcionalidades.
Un CRM en la nube (también llamado CRM cloud) es aquel que ofrece sus servicios a través de internet y aloja todos sus datos en un servidor. A diferencia de los CRM locales que se pueden instalar en tu dispositivo, estos poseen un menor riesgo respecto a la pérdida de datos.
El objetivo de todo CRM es hacer más automática y eficiente toda la gestión con los clientes para que tu empresa pueda aumentar su productividad. Además, gracias a la inteligencia artificial y al aprendizaje automático, los CRM están en constante progreso y tienen una gran perspectiva de mejora en el futuro.
Los CRM son especialmente recomendables para aquellos negocios que están creciendo y cuya gestión manual de las relaciones con el cliente se vuelve cada vez más tediosa, difícil y costosa. Los CRM son la clave para dar un paso más en la eficiencia de tu empresa y abandonar las famosas hojas de cálculo. Cualquier CRM es capaz de: guardar toda la información que desees de los clientes, automatizar acciones, monitorizar las interacciones de los usuarios… No obstante, los CRM en la nube tienen una serie de ventajas respecto a los CRM locales que los convierte en una de las mejores soluciones de marketing para potenciar tu negocio.
Al almacenarse todos los datos en la nube, el mantenimiento del software y las actualizaciones se llevan a cabo por la web y no se requiere de personal técnico.
Los CRM en la nube, al no instalarse en los dispositivos, no ocupan espacio en el disco duro, por lo que este será otro aspecto del que no tendrás que preocuparte.
En las empresas, son muchos los profesionales que acceden al CRM, y contar con uno local puede generar problemas de accesibilidad. Con un CRM en la nube esto no sucede. Al estar ubicado en la red, cualquier que tenga la contraseña puede entrar desde cualquier dispositivo y a cualquier hora.
Debido a que un CRM en la nube no necesita de la contratación de un servicio que realice el mantenimiento o las actualizaciones, y tampoco requiere de servidores físicos, resulta mucho más económico para las empresas. Por tanto, si tienes un negocio que todavía está creciendo y necesitas optimizar gastos, es una gran opción para ti.
La gran mayoría de proveedores de CRM en la nube, como Hubspot, garantizan a sus clientes un servicio libre de ataques y filtraciones. Por tanto, tus datos están más a salvo que contando con un CRM tradicional.
A diferencia de con los CRM locales en los que es mucho más complicada su instalación, los CRM en la nube permiten agregar otras herramientas de forma fácil y prácticamente automática para trabajar con ellas dentro del propio programa.
Los CRM más tradicionales venían con una serie de características y funcionalidades ya determinadas, las cuales no se podían modificar. En cambio, con los que se encuentran en la nube, tu propia empresa puede seleccionar las funciones que más le interesen, así como establecer filtros para que el trabajo sea más efectivo.
Un CRM en la nube funciona igual que cualquier otro gestor de relaciones con el cliente, solo que de forma mucho más sencilla y con muchas más posibilidades.
Con un nombre de usuario y una contraseña, cualquier miembro del equipo (independientemente del ámbito en el que trabaje) puede acceder a él, sea la hora que sea y con el dispositivo que sea, y disponer de un usuario propio.
Lo positivo de que puedan acceder personas de diferentes áreas es que todos pueden tener una visión, tanto particular de su propio campo, como general de la empresa. Al conectar los datos de ventas, de atención al cliente y de marketing se puede gestionar de una manera más eficaz el trato con los clientes y ver su viaje a través del embudo de ventas de una forma más clara, algo que puede ayudar mucho a perfeccionar dicho embudo.
Es uno de los gestores más completos y, además, cuenta con una versión gratuita muy completa que dispone de informes detallados, chatbots, correo electrónico, páginas de aterrizaje y mucho más.
Otro punto positivo es que es tremendamente útil tanto para grandes empresas como para pymes.
Su panel es muy intuitivo y claro, por lo que podrás conocer todos los datos y acciones en un simple vistazo. Al ser tan sencillo, cualquier profesional nuevo que se incorpore al equipo no requerirá casi de proceso de aprendizaje con esta herramienta.
Bit es un CRM en la nube hecho especialmente para promotores inmobiliarios, por lo que dispone de las mejores funcionalidades para este tipo de profesionales y sus negocios. No obstante, independientemente de tu sector puedes encontrarte con un gestor muy bueno con una gran eficiencia.
Lo bueno de Pipedrive es que está diseñado por personas que tienen experiencia en la venta, por lo que saben qué es lo que necesitan realmente los negocios.
Bitrix es un CRM en la nube muy económico, pero con una gran cantidad de funcionalidades, en concreto 35.
Todas ellas son útiles y no solo te ayudan con la gestión de los clientes, sino también con las facturas.