Facebook es la red social más usada del mundo, lo que la convierte en una plataforma que debes plantearte incluir en tu estrategia de contenido. Si, tras un análisis, descubres que tu audiencia tiene una clara presencia en este portal, sin duda, es el momento de comenzar a trazar una estrategia de marketing de contenidos en él para aprovechar todo su potencial.
Para ayudarte a conseguirlo, en este artículo te daremos toda la información que necesitas para empezar. ¡Vamos allá!
Publicar contenido en Facebook puede ayudarte, sobre todo, a aumentar el alcance de tu contenido y a potenciar la conciencia de marca, es decir, el hecho de que los clientes reconozcan y recuerden tu marca en diferentes situaciones. Además, también es una muy buena forma de atraer más tráfico, tanto a tu página web como a tu ecommerce, así como de generar más leads (clientes potenciales).
Por otro lado, debido al gran alcance que tiene esta plataforma, te será posible llegar a partes de tu audiencia muy difíciles de alcanzar en otras redes sociales.
Primero de todo, debes tener un perfil comercial en la red social. De esta forma, a diferencia de los perfiles personales, tendrás acceso a herramientas, beneficios y funcionalidades únicas para las empresas. Por ejemplo, podrás poner en tu perfil información específica sobre tu marca y un botón de llamada a la acción, entre muchas otras cosas.
Si todavía no tienes cuenta en la plataforma, puedes crearla haciendo clic en este enlace: www.facebook.com/pages/create/
Una vez tengas tu perfil creado en la red social, es interesante invitar a tus potenciales clientes y a tus clientes actuales a que te sigan.
¿Qué quieres alcanzar con tu marketing de contenidos en Facebook? Esta es la primera pregunta que debes hacerte cuando decides emprender una estrategia en esta plataforma. La respuesta que des a esta cuestión será la que te guíe a la hora de crear cada una de tus publicaciones. Tu objetivo no tiene por qué ser uno solo, ni tampoco tienen por qué ser estáticos, pudiendo cambiar a medida que tu cuenta crece.
Analiza cuáles son los hábitos, preferencias y objetivos de los usuarios de Facebook y qué les diferencia de los de otros canales. Si estás empezando en esta red social, es normal que no puedas analizar a tu comunidad porque será muy pequeña todavía. Por ello, te recomendamos que, en este caso, utilices los datos que ya tienes de análisis previos sobre tu audiencia e investigues en diferentes estudios cómo ese tipo de perfiles se comportan en esta red social
Otra alternativa, si tienes un grupo amplio de seguidores en Facebook, es que analices la información de tu público a través de la herramienta gratuita Audience Insights, donde podrás obtener datos de comportamiento y demográficos.
Una vez ya tengas claro tu objetivo y cómo se comporta tu audiencia en Facebook, es el momento de establecer qué publicar y cuándo publicar.
Para decidir qué tipo de contenido te va a funcionar mejor, pregúntate qué quiere y le gusta a tu audiencia. Hay muchos estudios a los que puedes acceder online donde te pueden orientar acerca del tipo de contenido que le gusta a las diferentes audiencias. Sin embargo, mediante el ensayo y error también puedes sacar conclusiones muy interesantes sobre tu audiencia.
En cuanto a la frecuencia de publicación, Facebook recomienda mantenerse activo, ser constante y publicar al menos una vez por semana, aunque muchos expertos recomiendan hacerlo de forma un poco más frecuente sin superar las 7 publicaciones semanales.
En cuanto al horario de publicación, también puedes probar tú mismo cuáles te funcionan mejor. Pero siempre puedes recurrir a estudios como el de Sprout Social sobre las tendencias de social media de 2022.
Si ya tienes una guía de estilo creada para tus otros canales de marketing, síguela también a la hora de crear contenido en Facebook. Si, por el contrario, todavía no la tienes, es el momento de crearla. En una guía de estilo debes definir cuál va a ser la voz, el tono y la personalidad de tu marca. De esta forma, cualquier profesional que vaya a trabajar contigo en la creación de contenido podrá adaptarse fácilmente a lo que buscas y ser capaz de mantener la consistencia en tu mensaje.
Tener un estilo bien definido también ayuda mucho a potenciar la conciencia de marca de la que antes hablábamos.
La organización es clave para trabajar en redes sociales y aprovechar al máximo este tipo de plataformas. Tener un calendario de publicaciones te ayudará a llevar un seguimiento de todo el contenido y a planificar tus publicaciones con antelación. Para ello, puedes utilizar una simple hoja de Excel o las diferentes herramientas online que hay a tu disposición. Con esta última opción podrás, además, programar tus publicaciones.
Por mucho que publiques, si no interactúas con tu audiencia estás dejando escapar una gran cantidad de beneficios y oportunidades que otorgan las redes sociales. Por ello, en tu estrategia de marketing de contenidos en Facebook también debes dejar claro cómo vas a relacionarte con tu público. Para ayudarte, aquí te dejamos algunas recomendaciones:
Responde lo antes posible a los mensajes y comentarios.
Contrata a un profesional que te ayude con la gestión de la plataforma.
Abre debate y pregúntale cosas a tu audiencia.
Sé amable en tus interacciones.
Comparte el contenido que generan tus usuarios usando tus productos o servicios.
No olvides dar like y comentar en publicaciones sobre tu marca.
No importa cuáles sean tus objetivos en Facebook, siempre es fundamental que realices un seguimiento de tus publicaciones y de tu progreso de forma periódica. No obstante, dependiendo de cuál sea tu finalidad en esta red social, deberás fijarte más en unos resultados que en otros. Por ejemplo, si uno de tus objetivos es aumentar tu conocimiento de marca, deberás monitorizar las visitas que tiene tu perfil y los “Me gusta” que recibes.
No te preocupes por la localización de estas estadísticas, Facebook te las ofrece todas de forma integrada en su plataforma.
Es uno de los mejores formatos por su increíble atractivo. En concreto, los vídeos cortos o reels son los que más popularidad están teniendo en la plataforma, los cuales surgieron en respuesta a la gran fama que estaba ganando la red social TikTok. Por ello, te recomendamos que estos sean el principal contenido de tu perfil.
Otras alternativas que puedes explorar en cuanto a vídeo son las retransmisiones en vivo y los vídeos estándares como los tutoriales o entrevistas.
Facebook es una excelente plataforma para redirigir a tu público a tus páginas principales. Y una de las mejores formas de hacerlo es a través de la inclusión de enlaces hacia tu blog o hacia ciertos productos o servicios.
Por supuesto las fotografías no pueden faltar. Pese a que antes eran el formato principal de contenido, ahora han quedado un poco regaladas a los ya mencionados reels o vídeos cortos. Sin embargo, eso no significa que debas olvidarlas, pues el público también aprecia mucho este tipo de publicaciones, sobre todo si se presentan en forma de carrusel (varias fotografías subidas en una única publicación que se pueden visualizar deslizando la pantalla de izquierda a derecha).
El texto es imprescindible en cualquiera de tus publicaciones. Ya subas un vídeo, una imágen o un enlace, acompañarlo de texto es fundamental por diferentes motivos:
Da información extra que no puedes incluir en el vídeo, foto o enlace.
Está demostrado que incluir texto en las publicaciones aumenta la tasa de participación en cualquier tipo de contenido.
No escribas textos demasiado largos, es mejor que estos sean concisos y atractivos.
A diferencia de un sitio web, donde eres dueño de todo el contenido original que subas, en Facebook no ocurre lo mismo, pues la plataforma puede usar, almacenar y compartirlo con terceros. Esto se debe a las condiciones de uso que expresamente aceptamos como usuarios cuando nos damos de alta en la plataforma. Por ello, pese a que le dediques mucho esfuerzo a esta red social, te recomendamos que la mayor parte del contenido que publiques apunte a tu propio sitio web o ecommerce. Es decir, que tus publicaciones inciten al público a visitar tu blog, a suscribirse a tu newsletter o a conocer una página de destino o de producto. De esta forma, si le ocurre algo a tu cuenta, te aseguras que el público conoce y tiene presencia en otras de tus plataformas y puede seguir estando en contacto contigo.