El modelo de negocio de las redes sociales como Facebook está muy claro: son gratuitas para el usuario, a cambio de que este ceda su información para que le envíen publicidad altamente personalizada.
Facebook no comparte la información de los usuarios con otras marcas. La privacidad está garantizada. Pero se ayuda de estos datos para que las marcas que usan Facebook Ads puedan acertar mejor en quién impactan y con qué objetivo.
Por ejemplo, una marca de ropa quiere promocionar una línea para gente de 30 a 40 años y que viva en núcleos urbanos de más de 50.000 personas, y que además les guste el deporte y la vida sana. Facebook buscará perfiles que cumplan estos requisitos y les mostrará los anuncios, eso sí, sin dar a la marca quiénes son esos usuarios y sus datos personales.
A partir de aquí, está bien abrir la reflexión: ¿somos conscientes de lo que realmente la publicidad de Facebook sabe sobre cada uno de nosotros y cómo lo usa para ofrecernos anuncios? Vamos a analizarlo.
Como es lógico, Facebook dispone de información sobre todo lo que alguna vez uno ha publicado en su perfil. Lo que no es tan conocido es que puedes solicitar que Facebook te envíe esta información a través de este formulario de solicitud de datos personales.
Si te animas a descargarlo, verás un montón de información relacionada con tu usuario de Facebook:
Aunque este archivo contiene muchísimos datos sobre ti, no es todo lo que Facebook sabe. Y es que la red usa toda esta información para deducir diferentes categorías de intereses para los anunciantes. Para ver cuáles son los tuyos, tienes que ir a Configuración --- Anuncios.
Aquí puedes encontrar datos como "vive lejos de su familia", "tiene un móvil con 4G" o "comparte su hogar con compañeros de piso". Eso sí, no siempre acierta.
Para elaborar esta lista de intereses detallada, Facebook no solo tiene en cuenta las publicaciones en nuestro muro o las páginas que nos gustan, sino también factores como desde dónde nos conectamos, lo que comentamos y compartimos e incluso datos que compra a empresas proveedoras de este tipo de información.
El usuario de Facebook puede borrar la información sobre sus intereses en Anuncios, pero eso no quiere decir que la red "se olvide" de ella, solo que dejará de compartirla con los anunciantes. En otras palabras, seguirás viendo publicidad, pero estará menos personalizada.
Como decía al principio de este post, el modelo de negocio de Facebook se basa en comerciar con la información de sus usuarios, ofreciendo a las empresas la posibilidad de lanzar anuncios altamente segmentados.
Gracias al uso que los usuarios hacen de la red y a la manera en que esta almacena información, los anunciantes pueden hacer segmentaciones tipo "usuarias de 40 a 50 años con puestos de responsabilidad y un gran uso de la tecnología". Así, cada impresión tiene más posibilidades de dar en la diana del público objetivo, y los usuarios de Facebook tienen más números para recibir anuncios que les interesen.