Seguro que has escuchado mil veces que, a día de hoy, una marca es mucho más que sus productos o servicios y que la experiencia del cliente es un elemento fundamental en cualquier estrategia de marketing.
Pues bien, aunque estés cansado de oírlo, la verdad es que esta afirmación es totalmente cierta. No es suficiente con que lo que vendas hable por ti, debes darle al público mucho más. En este contexto, el field marketing es el ejemplo perfecto de cómo crear una estrategia de marketing digital que ponga a los clientes en el centro y les ofrezca una experiencia que les anime a confiar en tu marca.
El field marketing (marketing en el terreno, en español) es un tipo de publicidad que basa su estrategia en hacer desaparecer todos los intermediarios que habitualmente participan en una campaña de marketing para, así, poder relacionarse cara a cara con el público.
El principal objetivo del field marketing es crear una experiencia cercana y atractiva para que el cliente pueda interactuar de primera mano con el producto o servicio y tenga una idea mucho más clara de cómo es y de todo lo que puede ofrecer.
Con el field marketing el cliente pasa de ser un ente pasivo (como en la mayoría de campañas) a convertirse en un elemento activo de la misma, cuyas acciones son las protagonistas.
Información del público objetivo: pese a que ya hayas segmentado el público al que quieras dirigir tu campaña de field marketing y conozcas muchas de sus características, siempre hay aspectos que se te van a escapar. Con este tipo de estrategia de marketing conocerás de primera mano muchas respuestas del público que compra tus productos o servicios y, con ellas, muchas claves de su personalidad y necesidades. De esta manera, podrás realizar los cambios necesarios para conseguir mejores resultados.
Medición fácil del ROI: gracias a que con las estrategias de field marketing puedes conseguir información en tiempo real, es mucho más fácil medir el retorno de la inversión.
Precio asequible: el field marketing está al alcance de todo tipo de empresas, tanto pymes como grandes corporaciones. Hay una gran diversidad de opciones y de posibilidades de presupuestos, por lo que se pueden adaptar a tus capacidades.
Reputación de la marca: el marketing digital presenta la dificultad de que es difícil convencer al público, pues el factor humano es fundamental. Con el field marketing, ganarse la confianza de los consumidores es más sencillo, ya que existe un trato más cercano.
Posibilidades de fidelización: por la misma razón que antes, por la existencia del factor humano a la hora de desarrollar el field marketing, hay más posibilidades de que los clientes se conviertan en habituales.
Convence a clientes dudosos: las reseñas negativas pueden destruir un negocio. En tu campaña de field marketing los representantes de tu marca pueden responder las dudas y problemas en persona y en directo, reduciendo así las experiencias negativas o las dudas.
Mejor transmisión del mensaje: en el field marketing el público puede probar de primera mano cómo funciona tu producto o experimentar la calidad del servicio que ofreces, por lo que tu mensaje se comprenderá más profundamente.
Merchandising: no es un tipo de campaña de field marketing propiamente dicho, pero suele acompañar a este tipo de estrategias para que el público se lleve algún recuerdo y aumente su brand awareness (conciencia de marca).
Conferencias: los consumidores agradecen mucho este tipo de experiencias educativas e informativas donde pueden conocer más en profundidad la marca y sus características.
Demostraciones de producto: suelen encontrarse mucho en los supermercados, donde muchas marcas de alimentos aprovechan para ofrecer muestras de sus productos. En ellas, el personal puede informar al público de las características y beneficios de la oferta, además de responder sus preguntas. Es una forma excelente de ofrecer al público un trato personalizado y humano.
Ferias: son excelentes para atraer a una gran cantidad de público objetivo, ya que las ferias suelen tratar de una temática concreta y las personas que asisten ya se les presupone un interés alto.
Acciones de calle: suelen tener un toque creativo y muy llamativo, pues es muy difícil que el público se muestre interesado fuera de las tiendas.
Muestras: consisten en obsequiar a los clientes o potenciales clientes con un producto o servicio, pero en una versión reducida para que se haga una idea de lo que es y se interese en adquirirlo al completo.
Llegados a este punto, ya te habrás dado cuenta de que el field marketing no tiene nada que ver con el marketing digital, de hecho, son dos mundos diferentes. Mientras que uno lleva existiendo mucho tiempo entre nosotros, siendo un método muy antiguo, el otro surgió gracias al desarrollo de internet y la digitalización. Sin embargo, pese a sus diferencias, combinar las dos estrategias puede ser un gran método para conseguir lo mejor de ambos mundos.
No debes ver estas dos formas de desarrollar la publicidad desde una perspectiva de enfrentamiento o rivalidad, sino como una manera de cubrir las carencias que tiene una, con la otra, y viceversa.
Mientras que el marketing digital puede resultar distante, poco humano y crear desconfianza en el público, el field marketing puede solucionar ese problema.
Por otro lado, mientras que el field marketing tiene limitaciones más relacionadas con el alcance y pueden resultar menos económicas, el marketing digital tiene la capacidad de llegar a una gran cantidad de personas con una inversión mínima.
Y como hemos mencionado antes, no pienses que por ser una pequeña o mediana empresa no vas a tener la capacidad de crear estrategias de field marketing. ¡Para nada! Puedes crear campañas pequeñas y localizadas que te proporcionen una repercusión muy positiva. Las personas, en un mundo tan digitalizado, buscan marcas que cada vez se acerquen más a ellas y les proporcionen una atención personalizada y cercana, por lo que hay muchas posibilidades de que reciban tu campaña con los brazos abiertos.