Por Héctor Borrás, publicado el 21 junio 2017
Activas una campaña y todo sale a pedir de boca. Los usuarios comparten, la viralidad de tus campañas crece y el tráfico a tu web se multiplica por 4 o por 5 en cuestión de días. Pero de repente... ¡plof!: tu servidor no aguanta tantas visitas de golpe y se cae. En vez de conversiones, ahora lo que tienes son usuarios mosqueados porque la experiencia con tu marca no está siendo positiva.
Pero tranquilo, le ha pasado a muchísimas marcas. Lo importante es solucionarlo rápido y evitar que te suceda en futuras ocasiones. Crear una campaña de alto tráfico y salir airoso del intento es más que posible. ¿Quieres saber cómo? Don't panic and keep reading!
Por qué se caen los servidores de un sitio web
Una campaña nueva de AdWords, una portada en Menéame, un post compartido por miles de personas en Facebook, el lanzamiento de un nuevo producto... cualquier evento que provoque un incremento del tráfico web puede hacer que los servidores no den más de sí y la web se caiga. Pero ¿por qué pasa esto exactamente?
- Porque estás usando un hosting compartido. Puede que tu web no tenga ningún problema, pero la de tu "vecino" sí. En un hosting compartido estás repartiéndote la capacidad del servidor con el resto de clientes alojados, por lo que su comportamiento te afectará.
- Porque el proveedor falla. A veces, sencillamente, el proveedor no está preparado para gestionar las exigencias o la cantidad de tráfico de una web determinada. Si tienes problemas continuos de caída y no mejoran probando otras soluciones, es hora de plantearte un cambio de proveedor.
- Porque los recursos están sobrecargados por problemas técnicos, como fallos de desarrollo, aplicaciones poco optimizadas o descuidos.
- Porque hay un fallo en el hardware. Como dicen los estadounidenses, "shit happens": un disco se ha roto, ha fallado la fuente de alimentación...
- Porque hay un fallo de seguridad. La seguridad web es un punto flaco de muchas empresas, lo que las hace vulnerables a todo tipo de ciberataques. A veces incluso ocurre que personas fuera de la empresa tienen acceso a los servidores sin que esta sepa nada.
Cómo manejar un incremento del tráfico web sin morir en el intento
Si sabes por qué se caen las webs, estás un paso más cerca para prevenirlo. Antes de lanzar tu próxima campaña de alto tráfico, ten en cuenta estos 4 puntos para evitarte sustos.
1) Elige un plan de alojamiento web que se adecue a tus necesidades.
Ten cuidado con las gangas: puede que un plan barato con servidores compartidos te ofrezca recursos "ilimitados", pero en la práctica no suele ser así. Es necesario tener una previsión del tráfico que vas a recibir y escoger la opción más adecuada a tus necesidades, no necesariamente la más económica.
2) Optimiza tu web para que consuma menos recursos.
El problema se puede atacar desde dos frentes complementarios: o contratas más recursos, o te apañas para consumir menos sin renunciar al tráfico web (o ambos). ¿Cómo? Haciendo que tu web gaste menos recursos del servidor.
Para optimizar este punto, lo ideal es consultar a un experto, pero aquí tienes algunas sugerencias para empezar:
- Optimiza las imágenes. A veces, usamos imágenes con un tamaño muy superior al que realmente es necesario para visualizarlas correctamente, consumiendo un montón de recursos innecesarios.
- Comprime las páginas con soluciones tipo Gzip.
- Optimiza la memoria caché. Idealmente, el contenido con pocas posibilidades de cambiar (imágenes, iconos...) debería almacenarse en esta memoria, evitando recargarse en cada visita.
- Limita las consultas de tu base de datos.
Como bonus extra, reducir los tiempos de carga de tu web te ayudará a mejorar tu posicionamiento SEO y tu Quality Score en AdWords.
3) Refuerza la seguridad web
Consulta a un experto en seguridad web sobre las mejores maneras de proteger tu web ante posibles ataques. Ganarás en tranquilidad y ahorrarás en posibles disgustos.
4) Sé precavido
Ya lo decían nuestras abuelas: mejor prevenir que curar... Si quieres estar preparado para un incremento del tráfico web en cualquier momento, lo más inteligente es planear de antemano.
Para ello, haz pruebas de carga de la web antes de momentos críticos (como el periodo de rebajas o de Navidad en un ecommerce) para saber cuánto puede soportar y ten un plan de emergencia para posibles caídas. Y si ocurre lo peor, ante todo no dejes tirados a tus usuarios: como mínimo, programa un mensaje que indique el tiempo estimado de inactividad de tu web.