Como marca, tener una mínima presencia en redes sociales se ha convertido en un imprescindible. Sin embargo, cualquier profesional o empresa que utilice las redes sociales debe saber qué es la madurez dentro de este canal de comunicación online, especialmente cuando las estrategias en marketing digital están centradas exclusivamente en este medio y de él depende alcanzar o no los objetivos y generar beneficios. Pero ¿qué es exactamente la madurez en redes sociales y cómo saber si se ha alcanzado o no?
El modelo de madurez en redes sociales es una especie de métrica con la que es posible evaluar el nivel de desarrollo y efectividad de un profesional o empresa dentro de este medio online. Esto significa que permite entender mucho mejor cómo se están utilizando las redes sociales y qué posición se ocupa dentro de ellas, lo que hace más fácil diseñar una estrategia que permita evolucionar para obtener unos mejores resultados.
Los niveles de madurez en redes sociales pueden variar en función del sector al que pertenezca el profesional o la empresa, su tamaño o sus objetivos. Es decir, el nivel de madurez para una empresa pequeña y familiar no será el mismo que el de una marca más grande, ya que los objetivos también serán diferentes. Pero, en general, saber identificar el nivel en el que se está sirve para poder alcanzar objetivos, saber si es necesario invertir o no en infraestructura y herramientas de marketing y detectar si se está aprovechando al máximo la red social o no.
Para poder aprovechar al máximo las redes sociales es importante conocer en qué etapa de madurez se está. Y para ello es necesario conocer cada una de las etapas, aunque estas puedan variar de un sector a otro o en función del tamaño de la empresa:
Aunque en general se pueden identificar hasta seis etapas dentro del modelo de madurez en redes sociales, no todos los profesionales y marcas deben pasar por cada una de ellas. Ya que, tal y como hemos comentado, en función del tamaño y los objetivos estas podrían variar.
Hay varios factores que son clave dentro del modelo de madurez en redes sociales. Uno de ellos es que es necesario diseñar una estrategia que incluya unos objetivos claros y en el que se haya definido el público al que se quiere llegar, así como las tácticas o acciones que se van a llevar a cabo para lograrlo.
Otro aspecto clave y también muy necesario es que hay que tener presencia en las redes sociales adecuadas, que serán aquellas en las que esté el público objetivo. Además, para poder llamar su atención y crecer dentro de cualquier social media se debe crear un contenido de calidad. Este también deberá ser original, atractivo e informativo y tendrá que adaptarse a la plataforma. Es decir, no es lo mismo crear contenido para una red social tan visual como Instagram que para Twitter.
Cuando lo que se persigue es alcanzar la madurez en redes sociales, la interacción con la audiencia es muy necesaria. Y, por supuesto, esta interacción debe ser bidireccional, ya que a la audiencia le gusta ver que sus mensajes se leen y se responden.
A todo esto hay que sumarle siempre la medición y análisis del rendimiento y los resultados obtenidos en los diferentes perfiles, ya que métricas como el alcance, la participación, el tráfico web y el ROI deben analizarse de forma regular para poder evaluar tanto el éxito de las estrategias como determinar en qué etapa dentro del modelo de madurez se está.
También hay otros factores que podrían ser determinantes, como la integración de las redes sociales en otras funciones de marketing, atención al cliente y ventas; la formación del equipo encargado de su gestión y la innovación y adaptabilidad, ya que lo que hoy funciona puede que mañana no, por lo que siempre hay que estar dispuesto a probar nuevas estrategias.
Para poder identificar la etapa de madurez en redes sociales y poder actuar en consecuencia, ya que tener este dato puede ayudar a saber qué camino tomar, es importante tener en cuenta una serie de aspectos.
Lo primero que se tendrá que hacer es evaluar la estrategia que se está siguiendo. Esto implica preguntarse si se tiene una estrategia para redes sociales clara y definida, con unos objetivos y un público al que dirigirse definido o, de lo contrario, no se está siguiendo nada. Si es esta última situación está claro que la empresa está en una etapa muy inicial, como la L0 o L1.
Si ya hay una estrategia pero no se están obteniendo resultados claros, probablemente la empresa esté en una etapa intermedia, como la L2 o L3. En este caso es importante examinar la presencia que se tiene en redes sociales y se deberá analizar el contenido que se comparte, si este genera la participación que se espera o no. En caso negativo deberán hacerse cambios para que el contenido resulte más atractivo, llamativo e interesante y genere esa participación que se espera.
Cuando la participación es alta y los resultados son favorables, seguramente se esté alcanzando un nivel superior, el L4 o L5, que es aquel en el que es necesario diseñar una estrategia con la que poder generar una relación duradera con los clientes y el público. Esto muchas veces implica tener varios perfiles, uno para atención al cliente, uno para ventas… con un equipo profesional detrás capaz de dar una respuesta adecuada y personalizada.
Podemos concluir, entonces, que conocer el nivel de madurez en redes sociales es muy útil para poder tener presencia en ellas. También es imprescindible para saber si hay que invertir más en ellas y qué se necesita para poder gestionarlas de una forma correcta y, así, seguir creciendo como marca.