Redes sociales, correo electrónico, televisión, prensa escrita, sitios web… A día de hoy, una marca tiene a su disposición una gran cantidad de canales y espacios en los que darse a conocer y promocionar sus productos o servicios. Y de eso trata el marketing multicanal, de desarrollar una estrategia de marketing que contemple diferentes plataformas o lugares físicos, siempre y cuando vayan a reportarle beneficios a tu marca. En este artículo te contamos qué es y te damos algunos ejemplos para inspirarte y orientarte cuando lo lleves a la práctica.
El marketing multicanal consiste en desarrollar varias campañas de marketing de forma simultánea en diferentes canales, tanto online como offline.
El principal beneficio de este tipo de estrategia es que te permite aprovechar al máximo tus posibilidades. Tu público objetivo no se encuentra en un único canal e, incluso, no todos visitan los mismos canales. La puesta en práctica del marketing multicanal es una de las mejores maneras de llegar a la mayor cantidad de clientes posibles. Sin embargo, hay que saber en qué canales enfocar tu esfuerzo, pues no tienes por qué tener presencia en todos ellos. A través de un análisis de tus consumidores, podrás saber cuáles son las plataformas o lugares que más suelen visitar y elegir dónde te merece más la pena estar activo.
Además de que las estrategias publicitarias multicanal son más efectivas en términos de alcance, el público es más propenso a confiar en aquellas marcas que están presentes en múltiples canales.
Mientras que la multicanalidad se basa únicamente en estar presente en diferentes canales, la omnicanalidad va un paso más allá, haciendo que todos los canales estén conectados entre sí. Pero, ¿esto qué quiere decir?
En las estrategias multicanal, cada canal de marketing sigue sus propios objetivos y estrategias. En cambio, la omnicanalidad (considerada una evolución de la multicanalidad) surge cuando los expertos se dieron cuenta de que los usuarios no se decantaban por un solo canal, sino que para una misma acción podían utilizar varios. Por ello, en la omnicanalidad los canales están sincronizados, ofreciendo al usuario una experiencia mucho más coherente y homogénea (donde en todos los canales se transmite el mismo mensaje) y personalizada (pudiendo recopilar datos del usuario para ofrecerle una mejor experiencia).
Estas son algunas de las plataformas más utilizadas en las estrategias multicanales de las empresas: