Por David Tomas, publicado en 4 enero 2021
Seguro que has oído hablar del marketing B2C o B2B, pero quizás no sepas que hay muchos más tipos de marketing en función del emisor y el destinatario de los mensajes. Vamos a dar un repaso a las diferentes categorías y centrarnos en el business to investor o B2I.
¿En qué consiste el business to investor?
Llamamos business to investor o B2I a las transacciones realizadas entre empresas e inversores, donde la empresa presenta su propuesta de negocio con el objetivo de atraer nuevas fuentes de inversión.
El caso más típico serían las empresas nuevas, que necesitan una inyección de capital inicial para poder poner en marcha su negocio. Pero también puede darse el caso de que una empresa establecida necesite una nueva ronda de financiación para lanzar nuevos productos o ampliarse a nuevos mercados.
Normalmente, las plataformas B2I operan a través de internet. El concepto consiste en captar proyectos de empresas, analizarlos, corregirlos y estandarizarlos, de manera que todos los proyectos estén disponibles en un mismo formato. Después, estos proyectos estandarizados se ponen a disposición de los inversores.
Para las empresas, las plataformas B2I suponen una gran oportunidad para incrementar su visibilidad y acceder a nuevas oportunidades de financiación. Por su parte, los inversores pueden ahorrar tiempo y esfuerzo accediendo a proyectos que ya han sido filtrados, mejorados y unificados, lo que facilita su estudio y análisis.
Hay que prestar especial atención para no confundir business to investors con business to individual, ya que para ambos se utiliza el mismo acrónimo (B2I). El business to individual es una nueva interpretación del business to consumer en la que, en lugar de dirigirse a un público masivo, la empresa centra sus esfuerzos de marketing en individuos particulares. Así, se pone más énfasis en entender las necesidades de los clientes y en construir relaciones que se desarrollan a lo largo del tiempo.
Otros tipos de marketing según el emisor y el receptor
B2C: business to consumer. Aquí, la empresa hace marketing dirigido directamente al consumidor final de sus productos. Es el caso más habitual de los productos de consumo. Uno de los mejores ejemplos de plataforma B2C online sería Amazon.
B2B: business to business. En esta categoría entrarían todas las empresas que producen productos y servicios para otras empresas, desde soluciones industriales hasta herramientas de marketing digital. Por ejemplo, aquí entrarían soluciones como Salesforce o Hubspot.
C2C: consumer to consumer. En este tipo de marketing, las transacciones se realizan directamente de consumidor a consumidor, pero sigue habiendo una empresa que facilita la infraestructura y regula hasta cierto punto las normas del intercambio. Por ejemplo, podemos pensar en Ebay o Wallapop.
G2C: government to citizen. Aquí el agente emisor de la comunicación no es una empresa, sino una institución oficial que busca mandar mensajes a los ciudadanos. Por ejemplo, los portales de hacienda, migraciones, aduanas, etc. serían un ejemplo de canal G2C, así como la publicidad institucional.
