Un diagrama de afinidad es un recurso utilizado en marketing y otras áreas que sirve para visualizar mejor grandes cantidades de datos o para entender ideas complejas. Consiste en agrupar los datos o los conceptos según su semejanza para poder analizarlos por partes y de una manera organizada.
Cuando tenemos que lidiar con una gran cantidad de datos o enfrentarnos a un brainstorming (lluvia de ideas), el diagrama de afinidad sirve para poner orden y guiarnos en el proceso de comprensión y construcción de estrategias.
Por eso el affinity diagram o diagrama de afinidad se utiliza mucho a la hora de idear estrategias de marketing o cuando se trabaja bajo el método design thinking.
Si lo que lees te parece interesante y crees que podría ser útil para tu empresa y estrategias de marketing, en este artículo te contamos cómo puedes poner en práctica el affinity diagram.
A grandes rasgos, como ya hemos comentado, un affinity diagram o diagrama de afinidad sirve para ordenar ideas o datos y poder entenderlos y analizarlos mejor.
Pero si nos centramos en cómo puede ayudar un diagrama de afinidad más específicamente en el día a día de una empresa o de un experto de marketing, las respuestas pueden ser varias:
Construir el buyer persona y el público objetivo: a la hora de crear estos perfiles se cuenta con una gran cantidad de datos que pueden ser abrumadores y nos pueden paralizar. Si no sabes por dónde empezar, una buena forma es utilizar el mapa de afinidad, ya que nos ayuda a organizar toda esa información para poder verla con perspectiva.
Generar ideas para estrategias de marketing: en estos casos es muy habitual utilizar el proceso de innovación design thinking y el brainstorming, pero puede ser un poco caótico. El mapa de afinidad puede poner orden y hacer que este tipo de reuniones de equipo sean más productivas.
Comprender el resultado de una escucha social o encuesta: en un proceso de social listening o al analizar los resultados de una encuesta de cliente se pueden generar grandes cantidades de datos y de conclusiones. El mapa de afinidad ayuda a organizar conceptos y a saber qué va bien y qué hay que mejorar.
Gestionar un proyecto y repartir tareas: puede ser complicado repartir las diferentes tareas que componen un proyecto entre diferentes profesionales, pero un diagrama de afinidad puede ser útil en el proceso.
Y estos son solo algunos ejemplos.
A continuación te dejamos los 5 pasos necesarios para construir un diagrama de afinidad en tu estrategia de Marketing:
Un diagrama de afinidad puede empezar con una lluvia de ideas o con la recopilación de diferentes datos o conceptos. Y cada una de esas ideas o información debe apuntarse en una tarjeta individual.
Esas tarjetas se colocan sobre una pizarra virtual o física sin ningún criterio, de forma totalmente desordenada.
Después, se hace el ejercicio de agrupar las diferentes tarjetas según su afinidad o similitud. Esta afinidad puede ser de diferente tipo según el objetivo que se quiera alcanzar con el diagrama de afinidad.
Tras agrupar cada tarjeta, se le asignará un nombre a cada categoría o grupo.
Ahora que ya está todo ordenado, se pueden entender bien todas las ideas y sacar conclusiones sobre cada grupo.
El diagrama de afinidad puede realizarse manualmente, pero hay herramientas que pueden hacernos más fácil el uso de este recurso. A continuación te dejamos algunas de las plataformas más interesantes a nivel creativo:
Canva: ofrece una gran variedad de estilos para crear digitalmente tus mapas de afinidad y poder ir construyéndolo con tu equipo en directo. Si trabajáis a distancia es muy útil, pues permite intervenir a diferentes personas a la vez en la creación del diagrama de afinidad.
Figma: es menos accesible que Canva, pero también cuenta con una gran variedad de diseños.
Edit: es totalmente gratuito y aunque no permite tanta personalización, es una alternativa también muy interesante.