La mejora progresiva es una estrategia de diseño y desarrollo de sitios web que se utiliza para lograr páginas y aplicaciones modernas que garanticen una buena experiencia de usuario y sin problemas de rendimiento, algo fundamental para conseguir un buen posicionamiento SEO. En este tipo de estrategia el diseño web empieza con una base simple a la que se le van añadiendo mejoras según surgen necesidades o según lo requiera el sistema.
Uno de los principales beneficios de aplicar una estrategia basada en la mejora progresiva es que se consigue una página web o aplicación con una base sólida y eficiente, optimizada para el tipo de navegadores y dispositivos que haya actualmente. Según vayan surgiendo nuevas necesidades o según lo requiera el sistema, se irán añadiendo mejoras.
Otro de los beneficios es que en este tipo de enfoque se le da mucha importancia a la accesibilidad, por lo que las páginas web y las aplicaciones se diseñan pensando en que cualquier usuario pueda acceder a sus contenidos, independientemente del dispositivo que utilice o las necesidades que tenga.
También se ha podido comprobar que este tipo de estrategia ayuda en el posicionamiento SEO, ya que se utiliza una estructura HTML, lo que facilita la estructuración del contenido mediante etiquetas y elementos. Justamente esta estructuración hace que el usuario se sienta mucho más cómodo navegando por el sitio web o utilizando la aplicación y que los motores de búsqueda entiendan el tipo de contenido que hay, por lo que disminuye la tasa de rebote y aumenta el tráfico orgánico.
Utilizar la mejora progresiva se ha convertido en una estrategia de marketing muy eficaz, ya que los sitios web y aplicaciones con este tipo de diseño son fácilmente legibles por los crawlers. También son páginas de muy fácil acceso, lo que facilita la indexación del sitio.
Otra cosa destacable es que cuando una página se adapta a cualquier dispositivo y tamaño de pantalla, mejora la usabilidad y experiencia de usuario, algo que también afecta directamente al SEO. Además, en el caso de ser una ecommerce o marca, cuanto más agradable y cómoda sea la navegación, más probabilidades de reducir la tasa de rebote y aumentar las conversiones.
También es importante tener en cuenta que cuando un sitio web ofrece una buena experiencia de usuario, más tiempo pasa este en la página, lo que a largo plazo afecta positivamente en el posicionamiento dentro de los motores de búsqueda como Google.