En marketing se habla mucho de nichos o incluso micronichos de mercado. Dar con un nicho por explorar presenta muchas ventajas, sobre todo para empresas que no cuentan con el presupuesto para hacer campañas masivas. ¿Qué es exactamente un nicho de mercado y qué beneficios puede aportarte? ¡Te lo contamos!
Un nicho de mercado es una parte pequeña del mercado compuesta por individuos con una serie de características y necesidades homogéneas, que no están del todo cubiertas por la oferta general del mercado. Un micronicho es un subsegmento del nicho que tiene unas necesidades aún más concretas y difíciles de satisfacer.
Por ejemplo, podríamos establecer que un nicho es "corredores de largas distancias en la montaña" y dentro de este nicho, podríamos encontrar el micronicho "corredores de largas distancias en la montaña que participan en carreras de varios días de duración". En ambos casos, se trata de grupos pequeños dentro de un segmento de mercado más amplio, que sería el de aficionados al running, y que tienen necesidades de equipamiento muy específicas.
Para que un nicho de mercado pueda considerarse como tal, debe cumplir una serie de características:
Es un grupo pequeño de personas, empresas o organizaciones, sobre todo en relación con el segmento de mercado al que pertenece.
Tiene un tamaño suficiente como para ser rentable en términos de marketing.
Tienen necesidades o deseos específicos y que se parecen entre sí. Un nicho de mercado se caracteriza por necesitar o desear productos o servicios con un cierto grado de complejidad.
Están predispuestos a comprar productos o servicios que se adecuen a sus necesidades y cuentan con la capacidad económica para hacerlo. De hecho, están dispuestos a pagar un extra para resolver sus necesidades.
Hay pocos o ningún proveedor que se encarguen de sus necesidades. Dado que los productos y servicios destinados a un nicho de mercado revisten cierta complejidad, lo normal es que haya pocas o ninguna empresa que se encarguen de producirlos.
Hay muy poca o ninguna competencia. Al entrar en un nicho nuevo, nos encontraremos con un grupo de clientes que tiene dificultades para encontrar productos y servicios que se adapten a sus necesidades. A su vez, esto hace que estén mucho más dispuestos a comprar.
Resulta más fácil posicionar en internet. La falta de competencia hace que los nichos de mercado ofrezcan facilidades para hacer SEO y SEM, ya que habrá menos empresas intentando posicionarse por los términos relacionados con el nicho.
Es más sencillo segmentar nuestra publicidad. Como nos dirigimos a un público muy específico, podemos segmentar nuestros anuncios con facilidad y así garantizar que nuestra publicidad obtiene mejores resultados.
Hay más facilidades para fijar los precios. Como el mercado está muy poco explotado, tenemos mayor libertad para escoger el precio de los productos sin preocuparnos de la competencia y por tanto obtener mayores márgenes de venta.