Por Sol Gonzalez, publicado el 21 agosto 2024
El diseño inclusivo web es aquel que se intenta adaptar a la mayor cantidad de personas independientemente de sus circunstancias. El objetivo de este diseño es que cuantos más usuarios puedan moverse por él de forma sencilla, mejor, sin importar su edad, idioma, contexto tecnológico, discapacidad, nivel educacional, etc.
Cuando construimos una página web, es muy recomendable tener muy en cuenta el diseño inclusivo, pues esto nos permitirá que más público pueda moverse por la página y, en última instancia, que la consuman durante más tiempo o que terminen realizando una compra.
Por eso, en este artículo queremos contarte las claves del diseño web inclusivo para que lo puedas implementar en tu marca.
Diseño inclusivo y diseño accesible, ¿es lo mismo?
Antes de entrar en materia, queremos que entiendas bien la diferencia entre estos dos términos, pues suelen indistintamente de forma habitual creando confusión a la hora de diseñar una web.
El diseño accesible es aquel que busca que las personas con discapacidad tanto física como psíquica puedan navegar por un sitio web o programa sin dificultades o de la forma más normal posible.
Sin embargo, el diseño inclusivo es un término más holístico que abarca, además de la accesibilidad web, otras formas de diversidad como las que ya hemos indicado en la introducción. En otras palabras, tiene en cuenta, además de las discapacidades de la persona, su contexto cultural, demográfico y educativo, entre otros. Para que lo entiendas mejor, el diseño inclusivo podría también llamarse diseño universal, ya que busca ser accesible para todas las personas del mundo.
Principios fundamentales del diseño web inclusivo
Para que conozcas más en profundidad el concepto de diseño inclusivo, queremos presentarte los tres principios fundamentales sobre los que se sustenta, los cuales son las bases de su esencia y significado.
Accesibilidad
Una web con diseño inclusivo debe procurar que cualquier persona pueda acceder a ella independiente de si esta tiene algún tipo de discapacidad y garantizar que su experiencia sea similar.
Usabilidad
La usabilidad es un término que hace referencia a la facilidad de uso de una web. En ese sentido, un diseño inclusivo debe asegurar que la mayor cantidad de usuarios posibles sepan moverse por la página y les resulte intuitiva.
Universalidad
Por último, un diseño inclusivo también tiene que garantizar que las personas de todas las partes del mundo, independientemente de su contexto cultural, tecnológico o educativo, puedan moverse de igual forma por la web.
7 prácticas de diseño inclusivo
Implementar un diseño inclusivo en una web puede ser un reto incluso mayor que desarrollar un diseño accesible. Y es que, requiere una mayor comprensión de las limitaciones y contextos humanos. Además, no existe una herramienta que te permita conocer si has creado una experiencia inclusiva en tu web.
Sin embargo, sí que existen algunas buenas prácticas que te pueden ayudar a crear un diseño lo más inclusivo posible en tu página web, y queremos contarte algunas de las más interesantes.
1. Personajes ficticios
Al igual que creamos buyers persona que representen de forma ficticia los diferentes clientes ideales de nuestro negocio cuando queremos desarrollar una estrategia de marketing, cuando queremos implementar un diseño web inclusivo, también es interesante hacer lo mismo.
En ese sentido, debemos crear diferentes personajes que representen a las diferentes personas que van a acceder a nuestra web. Esto nos va a ayudar a comprender cómo interactúan con la web y a saber qué necesidades tienen.
En este caso, te recomendamos que por cada perfil que crees especifiques las siguientes cuestiones:
- Capacidad.
- Conocimientos digitales.
- Actitud hacia la tecnología.
- Nivel de acceso a la tecnología.
- Origen y cultura.
- Edad.
2. Diseño responsive
Otra buena práctica para implementar un diseño web inclusivo es desarrollar un diseño responsive. Este tipo de diseño se adapta a cualquier tipo de dispositivo (móvil, ordenador, tableta…) para garantizar la misma experiencia al usuario en todos los casos.
Es una de las prácticas más populares en este tipo de diseño, ya que no todos los usuarios utilizan el mismo dispositivo para navegar por la red. Implementarlo te garantizará que más usuarios se sientan cómodos navegando por tu página.
No queríamos terminar este apartado sin darte a conocer cuáles son los dispositivos más utilizados a nivel mundial.
Fuente: Statista
3. Contenidos multilingües
Aunque puedes habilitar tu página web para que esté disponible en diferentes idiomas, facilitando así el acceso a personas de diferentes partes del mundo y permitiendo que tengan la misma experiencia, no es lo más aconsejable a nivel SEO.
En su lugar, te recomendamos que crees una web para cada mercado en el que quieras vender y desarrolles su contenido en el idioma del lugar.
4. Lenguaje inclusivo
El lenguaje inclusivo es aquel con el que todas las personas, independientemente de su identidad, se sienten identificadas e incluidas. Este tipo de lenguaje, también llamado lenguaje no sexista o de género neutro, tiene su origen en algunos movimientos feministas de finales del siglo XX.
Algunas empresas deciden utilizarlo en sus estrategias de comunicación y, por tanto, también en el texto de su página web como acción dentro de su misión por crear un diseño web más inclusivo.
5. Glosario de términos
Otro de los factores que hay que tener en cuenta a la hora de implementar un diseño de este tipo es el nivel de conocimiento o educación de nuestro público objetivo. Si, por ejemplo, somos una empresa enfocada en un público con conocimientos muy técnicos y específicos del sector, quizás esta acción no sea interesante, pero si somos una marca que vende a un público más generalista, sin duda es una técnica interesante.
El glosario de términos es una pequeña lista de palabras ordenadas alfabéticamente y acompañadas de su significado. Puede ser interesante añadir uno en tu web si incluyes términos muy específicos para que todos los usuarios puedan entenderlos.
Normalmente, se añade un asterisco al final de los términos que quieres añadir en el glosario cuando se mencionan en la web. Sin embargo, puedes recurrir a otros recursos más actuales como hacer que aparezca una ventana emergente o pop-up con el significado cuando el usuario pase el cursor sobre la palabra en cuestión.
6. Lenguaje claro
Esta es una de las prácticas más básicas en un diseño responsive. El texto que implementes en tu web no debe ser confuso ni ambiguo, sino decir de forma sencilla y sin rodeos lo que se quiere. De esta forma te aseguras que todo tipo de personas lo puedan entender de la forma en la que deseas que lo entiendan, no dejando nada a la interpretación. En este sentido, contar con la ayuda de un profesional en UX Writing, puede ser interesante.
7. Interfaz intuitiva
Por último, una interfaz intuitiva es aquella que es fácil de entender y de usar por los usuarios. El diseño es crucial para conseguirla, por lo que te recomendamos que implementes prácticas como no saturar demasiado la web con elementos visuales, desarrollar un menú claro u ordenar todos los elementos de forma jerárquica y con sentido.