Seguro que has oído hablar de usabilidad web pero ¿te has parado a pensar en el papel de la usabilidad en tu email marketing?
En email marketing, cada aspecto que podamos mejorar multiplica los resultados de manera exponencial. Si tus newsletters ofrecen una buena experiencia de usuario, el porcentaje de aperturas y clics aumentará y generarás más conversiones entre tu base de datos. Así que vamos a ver qué es la usabilidad y cómo podemos usarla para mejorar nuestros emails.
Podemos definir la usabilidad como "diseño al servicio de la experiencia de usuario". Una buena usabilidad hace que el usuario interactúe con nuestros contenidos de manera cómoda y fluida, sepa en todo momento a dónde dirigirse y experimente sensaciones agradables... que terminará asociando a nuestra marca. Esto es, la usabilidad tiene el potencial de mejorar tanto los resultados como el branding.
A lo largo de los últimos años, la usabilidad web ha sido un tema de gran interés y se han ido diseñando una serie de pautas y buenas prácticas que podemos aplicar al email marketing. Si quieres saber cuáles son, ¡sigue leyendo!
Los emails se abren en muchos tipos de dispositivos y sistemas operativos distintos, por lo que siempre corremos el riesgo de que un usuario no pueda visualizar las imágenes.
Por tanto, si queremos garantizar una buena experiencia, tenemos que asegurarnos de que el email es comprensible y proporciona una buena experiencia en formato "solo texto". A su vez, para los usuarios que sí pueden verlas (que serán la mayoría), las imágenes son muy importantes para mejorar el atractivo de un contenido. Así que debemos combinar ambos recursos de manera armónica.
Y por supuesto, lo mismo se aplica a los elementos interactivos, vídeos, GIF y otros "extras" que queramos incorporar a nuestros emails. En definitiva, ten siempre un plan B para los usuarios que no puedan visualizar todos los elementos del correo.
Desde que un usuario ve un email en su bandeja de entrada hasta que se produce el clic final, la interacción está dividida en una serie de fases que siguen un orden lógico:
Cada una de estas etapas afecta a la siguiente y al ratio de aceptación general del mensaje y de la marca. Por tanto, se recomienda hacer tests A/B en los que comparemos variaciones de cada uno de ellos.
Otra buena práctica muy aconsejable es enviarnos a nosotros mismos una copia del email antes de lanzar la campaña. Así, podremos vivir el customer journey en nuestras propias carnes y ver si hay algún aspecto que no funcione.
Aquí tienes unos cuantos ejemplos interesantes, para que te inspires con ellos:
Espero que toda esta información te haya ayudado a entender mejor el factor de la usabilidad en los emails y su ayuda a la hora de mejorar el ratio de clic.