Por Oier Gil, publicado el 20 enero 2022
Los Call-To-Action o CTA es uno de los elementos más utilizados en las estrategias de Inbound Marketing y también uno de los más importantes, ya que es lo que invita al usuario a realizar una determinada acción. Su principal característica es que tiene forma de botón o enlace con un texto llamativo y atractivo que incite a hacer clic en él, aunque existen diferentes tipos.
Te explicamos los diferentes Call-To-Action que hay y que puedes incluir en una estrategia de Inbound Marketing.
Por qué es importante incluir Call-To-Actions (CTA) en tu estrategia de inbound marketing
Para que los usuarios realicen una acción específica es necesario incluir un Call-to-Action o una llamada a la acción. Aunque la acción parezca obvia, como comprar un producto o suscribirse a la newsletter, el usuario debe tener un botón o enlace en el que hacer clic. Lo ideal es que ese botón o enlace destaque de alguna manera entre el texto, ya que muchas veces los visitantes no leen todo el contenido, por lo que ese CTA podría perderse.
Si es importante, entonces, incluir una llamada a la acción dentro de una estrategia de marketing, es porque de este elemento depende el éxito del negocio online, ya que es una de las formas más eficaces de conseguir leads y clientes.
Tipos de Call-To-Action según el contenido
Se pueden distinguir hasta ocho tipos de Call-To-Action en función del contenido:
Generación de leads: el objetivo principal de este CTA es conseguir clientes potenciales y suele colocarse al final de la publicación o en la barra lateral. Para conseguir que los usuarios hagan clic en él, su contenido suele ser llamativo y debe explicar qué hay al otro lado de ese enlace.
Cumplimentación de formularios: se utiliza para hacer mucho más atractivo el envío de datos o información personal, por lo que en vez de crear un botón de “Enviar” se puede especificar qué se obtiene tras el clic. Por ejemplo: “Consigue tu guía”.
Lead nuturing: hay ocasiones en las que se consiguen leads que no están preparados para dar el siguiente paso, el de compra. El objetivo de estas llamadas a la acción es convencerlo de que compre a través de ofertas específicas que puedan resultarle más atractivas.
Descubrir un producto o servicio: el usuario debería poder encontrar la información relacionada con la marca o un producto o servicio específico de forma rápida y sencilla. En este caso el CTA debe ser sencillo, sin demasiado texto, pero destacar entre el contenido.
Cierre de venta: estos CTA suelen estar al final y tienen como objetivo que el usuario compre el producto o servicio en ese momento, ya que se espera que tenga toda la información. Por ejemplo “Consíguelo ya” o “Obtén ya tu plaza”.
Promoción de eventos: en este caso el objetivo es conseguir que asista el mayor número de personas a un evento, por lo que sirve para darlo a conocer e impulsar la venta de entradas. No suelen tener un espacio concreto dentro de la página y pueden colocarse en prácticamente cualquier lugar.
Leer más: si no se quiere mostrar todo el texto de una publicación, se puede recurrir al botón “Leer más” o “Ver más”. Es una manera de conseguir que el usuario no abandone la página si ve mucho texto, también de despertar aún más su curiosidad y de conseguir que las publicaciones más atractivas reciban el tráfico que realmente se merecen, ya que el usuario la tiene más a mano.
Compartir contenido en redes sociales: este es uno de los CTA más básicos que existen, ya que invitan al usuario a compartir el contenido en sus redes sociales. Gracias a este Call-To-Action se puede llegar a más público y generar tráfico web.
Según el objetivo de la campaña se utilizará un tipo de CTA u otro. En general todos deben resultar atractivos y destacar entre el resto de contenido para que no se pierdan entre texto e imágenes.
Tipos de Call-To-Action según posición en la web
Los Call-To-Action también pueden diferenciarse en función de la posición o el lugar que ocupan en la página web:
CTA básico: sería un botón que se coloca al final para conseguir una conversión.
CTA de encabezado persistente: suele colocarse en el encabezado o pie de página y es aquel que siempre está visible aunque el usuario se desplace por el sitio web. Es la mejor forma de que el CTA esté siempre disponible para cuando el usuario quiera hacer clic en él. Se suele utilizar, por ejemplo, para informar de una oferta genérica o para invitar al usuario a inscribirse en la newsletter.
CTA de intención de salida: esta llamada a la acción es, en realidad, un pop-up o una ventana emergente que aparece cuando el visitante hace intención de abandonar la página. Su objetivo es convencerlo de que se quede o realice una última acción antes de irse.
Web-To-Call: la mayoría de usuarios utilizan los dispositivos móviles para navegar, por lo que este botón sirve para comunicarse con la marca a través de una llamada con tan solo un clic.
Aunque los CTA son un elemento clave dentro de una estrategia de Inbound Marketing, es importante no abusar de ellos. Colocar demasiados Call-To-Action podría provocar que ninguno de ellos destacara lo suficiente como para que el usuario hiciera clic en él. Con esto queremos decir que definir muy bien el objetivo de esa llamada a la acción y colocarlo en el lugar que le corresponda dentro de la página es fundamental para conseguir que el usuario realice la acción deseada.