El inbound marketing es una metodología que se basa en atraer a los clientes ofreciéndoles valor. Es un sistema que se caracteriza por ser amigable y no intrusivo con el usuario.
Por contra, la publicidad PPC suele considerarse una metodología outbound, ya que en lugar de atraer al usuario hacia la marca, nos dirigimos directamente a él mediante la colocación de anuncios online. Sin embargo, si nos centramos en ofrecer valor, el PPC puede ser un canal de captación de usuarios muy interesante dentro de una estrategia inbound. ¡Veamos cómo!
Permite acelerar los resultados. Los canales típicos del inbound marketing, como el posicionamiento SEO de contenidos o el marketing en redes sociales, requieren cierto tiempo para alcanzar una masa crítica de tráfico. En cambio, con el PPC podemos dirigir visitantes a nuestras landing pages desde el primer momento.
Genera más leads cualificados. Como consecuencia lógica de lo anterior, si conseguimos atraer a más usuarios, también incrementaremos el número de personas que nos dejan sus datos de contacto y pasan a convertirse en leads. Así, podremos poner todo el proceso en marcha de manera mucho más eficaz.
Mejor segmentación del público objetivo. Las estrategias de inbound marketing siempre deben ir orientadas a un segmento de mercado o buyer persona concretos. Pero cuando publicamos contenidos en abierto, no siempre es fácil controlar quién acaba visitándonos. En cambio, con el PPC, tenemos un montón de opciones para segmentar la publicidad en función de aspectos como los datos demográficos, el comportamiento o los intereses de los usuarios.
Ayuda a depurar la estrategia de palabras clave. Si hacemos PPC en Google Ads, podremos generar datos sobre las palabras clave que generan más clics y conversiones. De esta manera, podremos implementar estos términos en la estrategia de posicionamiento orgánico y optimizar nuestro SEO.
Mejor reconocimiento de marca a lo largo del buyer journey. Los anuncios sociales y de Google Ads nos permiten generar visibilidad para nuestra marca, incrementando el número de usuarios que entran en nuestro proceso de conversión.
El lanzamiento de una nueva campaña de inbound marketing es un momento ideal para poner en marcha la estrategia de PPC.
Como decíamos antes, el marketing de contenidos y de redes sociales requiere hacer publicaciones regulares durante mucho tiempo antes de alcanzar un volumen de tráfico relevante. Pero con las campañas de PPC, puedes estar en el primer puesto desde el primer día si escoges las palabras clave y las estrategias adecuadas (aunque siempre hay cierto grado de optimización con el tiempo).
Si tienes un producto o una marca nuevos, lanzar una campaña PPC de alto volumen te permitirá darte a conocer rápidamente entre tu público objetivo. Según Clever Clicks, los anuncios PPC pueden incrementar la notoriedad de marca hasta en un 80%.
Otro momento interesante para poner en marcha una campaña PPC es si notas que tu campaña de inbound marketing está estancada y necesitas darle un empujón rápido a las métricas.
La investigación de palabras clave es una parte fundamental de una estrategia SEO. Una vez que sabes las palabras y los términos que tus clientes potenciales están utilizando en las búsquedas, tienes la información que necesitas para crear contenidos que les aporten valor.
Y por supuesto, la investigación de palabras clave también es el primer paso de una estrategia PPC para inbound marketing. Utilizando una herramienta como Semrush o el planificador de palabras clave de Google Ads, podrás ver rápidamente cuáles son los términos más buscados y con menor competencia. Esto significa que esas palabras clave son las que consiguen atraer la atención de la audiencia a la vez que resultan relativamente fáciles de posicionar.
Recuerda que además de utilizar palabras clave genéricas, también te interesa buscar oportunidades "de cola larga", esto es, keywords muy específicas que tienen menos búsquedas pero también menos competencia. Esta estrategia resulta especialmente interesante si estás empezando o si te mueves en un sector muy competitivo.
Uno de los primeros pasos de una estrategia inbound marketing debería ser definir tu buyer persona. Así, cuando te dispongas a lanzar tus anuncios PPC, deberías tener claros los principales aspectos de tu audiencia, como:
Edad
Género
Ubicación
Horas del día en los que están más activos
Dispositivo
Profesión
Intereses y hábitos
Comportamientos de compra
Interacciones previas con tu marca
Pues bien, toda esta información puede aplicarse para segmentar tu publicidad PPC y dirigirte exclusivamente a las personas con más probabilidades para convertirse en clientes de tu marca.
En tus campañas de inbound marketing, seguramente necesitarás hacer tests A/B con cierta frecuencia, por ejemplo, para ver qué versión de una landing page convierte mejor antes de lanzarla a gran escala.
Para que un test A/B sea fiable, debemos generar una cierta cantidad de tráfico a ambas variantes de la página antes de medir los resultados. Y aquí es donde tus campañas PPC pueden ser súper útiles: solo tienes lanzar anuncios dirigidos a ambas variantes y ajustar el presupuesto y las pujas para generar la cantidad de tráfico que necesitas.
Hay un montón de marcas que aplican la metodología inbound marketing, y eso hace que haya una cierta saturación en las redes sociales. De hecho, según Statista, el 91% de las empresas estadounidenses emplearon las redes sociales en 2019.
Si combinamos este dato con las limitaciones de alcance impuestas por algoritmos de redes sociales como Facebook, vemos que puede resultar difícil hacerse oír y conseguir la visibilidad que necesitamos.
Por ello, podemos combinar el inbound marketing con PPC mediante campañas de social ads que promuevan nuestras publicaciones entre el público objetivo y atraigan a más usuarios a los canales de la marca, para que se conviertan en seguidores e incrementen también el alcance orgánico.