Por Irene Riart, publicado el 9 marzo 2023
El ChatGPT es un chatbot que utiliza el modelo de lenguaje por Inteligencia Artificial GPT-3 y que ha sido entrenado con grandes cantidades de texto para que sea capaz de mantener conversaciones con cualquier persona y realizar tareas de traducción y generación de texto, entre otras.
Lo que más ha sorprendido de esta herramienta es su capacidad para dar respuestas muy concretas y completas sobre prácticamente cualquier tema y la naturalidad con la que es capaz de transmitir esa información. Es justamente esto lo que ha hecho que muchas marcas se planteen hasta qué punto puede utilizarse el ChatGPT en una estrategia de marketing de contenidos y si esto puede afectar o no negativamente al SEO.
Cómo podemos usar ChatGPT para crear contenido para nuestra web
ChatGPT puede ayudar en la creación de contenido, pero no puede considerarse un creador de contenido final. Esto significa que se puede utilizar para generar títulos y meta descripciones atractivas y llamativas, para encontrar palabras clave relevantes o hashtags y para facilitar la redacción de un artículo de blog o un post para social media. También es una herramienta muy útil para sacar ideas de preguntas frecuentes, optimizar la estructura de una publicación o página web, traducir un contenido a varios idiomas y otras muchas tareas.
Sin embargo, todos los elementos creados mediante ChatGPT deben revisarse posteriormente y modificarse y nunca deben considerarse contenido final. Es decir, no se debe publicar directamente lo que ha creado el ChatGPT porque Google lo penaliza. Aunque sea una herramienta capaz de crear contenido de forma totalmente autónoma, para que este tenga un valor a nivel de SEO y para el usuario debe editarse siempre.
Ventajas de usar ChatGPT para nuestra estrategia de contenidos
Teniendo en cuenta la utilidad de ChatGPT y cómo debe utilizarse, la herramienta de OpenAI puede tener ciertas ventajas dentro de una estrategia de contenido.
La principal ventaja de utilizar ChatGPT es que puede agilizar mucho algunas tareas dentro de una estrategia de contenidos, como la elección de temas para publicaciones o la elección de los mismos títulos de estas. También puede ser muy útil para clasificar las palabras clave según intención de búsqueda, así como encontrar keywords relevantes o, en el caso de que se trate de contenido para redes sociales, escoger los mejores hashtags.
Otra de las ventajas es que puede hacer mucho más sencilla la elaboración de ciertos puntos de un artículo, como la elección de preguntas frecuentes.
Al tratarse de una herramienta que entiende perfectamente el lenguaje hablado y escrito, se le puede hacer cualquier pregunta con el objetivo de que desarrolle textos en un idioma específico o se le puede pedir que haga una traducción. No obstante, y aunque esto puede considerarse una ventaja, cualquier texto elaborado a partir de ChatGPT no debe considerarse un texto publicable, pero sí puede servir de inspiración o guía al creador de contenido.
Peligros de usar ChatGPT en nuestra página web
Aunque el ChatGPT puede ayudar y facilitar algunas tareas dentro de la creación de contenido, también hay ciertos riesgos que deben tenerse en cuenta.
Antes de nada debemos recordar que toda la información que se introduzca en ChatGPT pasará a ser propiedad de OpenAI con el fin de mejorar la aplicación, ya que esta se nutre de ella. Esto significa que introducir datos personales o información delicada puede tener sus riesgos. También significa que en caso de pedirle, por ejemplo, que elabore un resumen o análisis de un documento, toda la información que contenga este pasará a ser propiedad de OpenAI para poder nutrir la base de datos de ChatGPT, por lo que se le estará dando un trabajo que realmente no le pertenece.
También hay que pensar que la respuesta que genera esta herramienta dotada de IA a cualquier pregunta es fruto de información recopilada de usuarios sobre ese tema específico. Esto significa que parte o la totalidad de esta información puede tener unos derechos de autor. Del mismo modo, esta información puede ser incorrecta o inventada o puede estar manipulada o desactualizada, ya que se trata de una aplicación que está aprendiendo a base de lo que dan los usuarios.
Teniendo esto último en cuenta, en el momento en el que se le pide a ChatGPT una información que se desconoce, es muy fácil creerse un dato incorrecto.
Siempre hay que valorar mucho más positivamente el contenido creado por un redactor, el cual se hace pensando en los usuarios, que uno hecho con un sistema de inteligencia artificial, donde el toque humano y personalizado es inexistente. Es más, ninguna aplicación puede mostrar los valores de marca a través de la redacción, ya que es un sistema que como no es capaz de percibir estos factores no puede reflejarlos a través de palabras.
Con todo lo expuesto queremos remarcar la ideal de que una aplicación dotada de inteligencia artificial como ChatGPT puede ayudar en una estrategia de contenidos, pero no puede reemplazar el trabajo humano partiendo de la base de que cualquier dato o información deberá comprobarse. A esto hay que sumarle que el texto que se dé como respuesta puede tener una autoría.
¿Es Google capaz de detectar los contenidos hechos con ChatGPT e inteligencia artificial?
Actualmente existe un debate bastante extenso dentro del mundo del marketing y el SEO sobre si Google podría o no detectar un contenido generado por ChatGPT y si este podría ser penalizado por el buscador.
Hay ciertas dudas sobre si Google puede o no detectar contenidos generados con ChatGPT o inteligencia artificial, pero lo que está claro es que su intención es conseguirlo. Google valora muy positivamente el contenido que aporte información de valor al usuario, lo que significa ofrecer los mejores resultados. Y justamente el contenido que pueda generar una herramienta como la que ofrece OpenAI no encaja con lo que pretende Google, por lo que su intención es descartar contenido generado de forma automática y que pueda manipular los resultados de búsqueda y no ayudar a los usuarios.
Una herramienta como la de OpenAI es capaz de generar textos que suenen naturales, como si los hubiese redactado un humano, porque ha analizado grandes cantidades de texto y ha extraído patrones y estadísticas sobre qué palabras pueden seguir después de una secuencia determinada. Sin embargo, hay herramientas que permiten detectar si un texto puede estar escrito por una persona o por una IA, ya que tal y como hemos mencionado, hay factores que no puede expresar un software porque no es capaz de entenderlos, pero sí puede hacerlos una persona. Teniendo este factor en cuenta, Google sí podría detectar contenidos hechos con ChatGPT.
Otro factor que debe tenerse en cuenta es que el parecido de dos o más textos de una misma temática creados mediante ChatGPT puede tener numerosos parecidos, ya que la información se habrá extraído de un mismo lugar, incluidos los errores si los hubiese. Este detalle podría facilitarle mucho a Google la detección de contenidos hechos mediante IA.
¿Cómo puede penalizar Google el uso de ChatGPT en nuestra web?
En este punto también hay un debate abierto bastante extenso sobre cómo puede Google penalizar el uso de ChatGPT para crear contenido web.
Si Google es capaz de detectar patrones de lenguaje no natural o información repetitiva, incorrecta o con falta de valor, lo considerará spam y lo eliminará de la SERP. Esto llevaría a no posicionar en el motor de búsqueda y a una pérdida de tráfico web.
También se debe tener en cuenta que Google lo que más valora es que el contenido sea útil para los usuarios y que le aporten cierto valor, algo que cree que no podrá ofrecer ChatGPT, que se nutre de la información facilitada por los usuarios. Y esta información, recordemos, que puede estar desactualizada o puede tener datos erróneos, por lo que no puede considerarse totalmente fiable.
Podemos concluir, entonces, que la utilización de una herramienta dotada de inteligencia artificial como ChatGPT puede ser beneficiosa para las marcas que se dediquen a crear contenido, ya que puede ser de gran ayuda en algunos puntos. Sin embargo, confiar plenamente una estrategia de content marketing a un software de este tipo es peligroso, ya que Google lo que quiere es contenido original y su intención es penalizar eliminando de la SERP a aquellas webs que lo hagan así.
Con esto queremos decir que como ayuda es muy útil, pero no puede reemplazar el trabajo de un creador de contenido y cualquier texto elaborado mediante IA deberá pasar por revisión después y deberá modificarse.